jueves, 10 de noviembre de 2011

Ejercicio democrático

Hoy quiero hablaros del ejercicio democrático. No, no me refiero al concepto “deporte para todos”, que está muy bien, sino al poco o mucho ejercicio que realizamos al votar.
Para muchos significa un ejercicio muy pequeño –salvo si viven lejos del colegio electoral y deciden ir andando-, y para otros, un tremendo esfuerzo mental: indecisión, éste sí-éste no… que acaba casi siempre en una improvisación como ejecución final del número gimnástico.

Los hay que no practican nada, los de la abstención. Y de veras que los comprendo, creen que se trata de un deporte poco efectivo, sin resultados, como aquel que se calza las zapatillas de correr cada día y ve que sigue teniendo el mismo michelín. Y es que la musculatura de nuestro país necesita todo un programa de entrenamientos para volver a alcanzar la forma.
 
¿Quién será capaz de encontrar un plan de gimnasia que, como el Pilates, nos devuelva el mejor resultado sin extenuarnos? ¿Quiénes son los gobernantes capaces de salir de esta crisis sin agobiarnos -como entrenadores rusos de los años 70- con recortes despiadados?

Yo también estoy desencantada, escéptica y en desacuerdo con muchos puntos de nuestro sistema de elecciones. Pero voy a votar. No hacerlo me parece una falta de respeto ante los que lucharon tantos años dejándose la piel por un derecho con el que yo he sido afortunada de nacer. Y pienso en tantas mujeres que aún en muchos países no pueden expresar su voz siquiera a través del voto.

Así que lo dicho: voy a votar. Y voy a emplearme a fondo. No sé si será porque dispongo este año de más tiempo, pero me estoy entrenando a conciencia. A saber: leo con cierto interés las noticias, veo los debates y –aunque no me creáis- me he leído cuatro programas políticos. Eso sí, el del PSOE e IU sólo por encima, ya que han sacado 146 y 85 páginas respectivamente.(Desde aquí alabo la síntesis de UPyD cuyo programa completo se queda en 45pgs, y el “espabile” del PP, que es el único que se ha molestado en colgar en la web un resumen de 10 páginas, al menos que yo sepa).

De modo que, mientras el voto en blanco siga teniendo el valor que tiene, voy a seguir entrenando para el día 20. Espero que con mi participación y la de todos, el nuevo equipo de gobierno (mayoritario, mixto o como las urnas quieran), sea capaz de reducir ese gran michelín que son los 5 millones de parados entre los que me encuentro.

Dejemos un rayito de esperanza para nuestro sistema, al que hay que cambiar pero que de momento es lo mejor que tenemos.

2 comentarios:

  1. Comparto ty reflexión en su totalidad. Me da mucha rabia la gente comodona que dice que no vota porque no va a servir de nada. Ahora sí, espero verte prontito y que me hagas un resumen de los programas entre unas cervecitas

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  2. Totalmente de acuerdo Bloggera bloggista. Yo también votaré aunque sea para comprobar si alguién es capaz de reducir ese michelín --al que yo también aporto 1 y año y medio de gramos acumulados-- a la categoría de "chichilla"... Ya sabéis q no podré estar en esas cervecitas pero beberos dos o tres por mi... Y ya sabéis... a votar!

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